De un camino largo y sinuoso, así les dijo Jaime Gilberto López Taylor a sus ahijados de la generación 2008B – 2013 A de la carrera de Médico, Cirujano y Partero del CUCS

En el marco del majestuoso auditorio Telmex de la Universidad de Guadalajara se llevó a cabo la graduación de la generación 2008B – 2013 A de la carrera de Médico, Cirujano y Partero del CUCS denominada Jaime Gilberto López Taylor. La generación más numerosa de la historia de la Universidad de Guadalajara de la licenciatura puesto que se graduaron 378 nuevos médicos.
Música, canto, honores a la bandera, discursos, anécdotas, risas, solemnidad y sobre todo, muchas pero muchas caras sonrientes fueron el común denominador del acto protocolario que contó con la presencia de autoridades del municipio de Zapopan, militares, instituciones hospitalarias y del Centro Universitario de Ciencias de la Salud encabezadas por el rector Jaime Andrade Villanueva.
Correspondió al coordinador de la carrera, Dr. Eduardo Gómez Sánchez dar el mensaje de bienvenida y en su epígrafe lo dijo todo. Aludió a Paulo Coelho: “El mundo está en las manos de aquellos que tienen el coraje de soñar y correr el riesgo de vivir sus sueños”. Los felicitó y les dijo que “no olviden que el mejor libro y testigos silenciosos de su preparación fueron sus pacientes, respétenlos, atiéndalos dignamente, ya que son ellos a quienes nos debemos”.
Enseguida vino el discurso más largo y fructífero del evento, el autor fue el representante de la generación José Rafael Vega Ramírez, presidente de la Sociedad de Médicos Internos de Pregrado del CUCS.
Destacó que “estar aquí y poder ver a mis compañeros es inolvidable. Imborrable verlos con esa expresión que reafirma el sí a nuestra vocación”. “vamos a seguir soñando porque aunque el destino marca el final de una etapa y aunque nuestros caminos se bifurquen, aquí no acaba todo aún nos queda mucho por andar”.
Enseguida el mensaje del padrino, Jaime Gilberto López Taylor quien el mismo se caracteriza como mal hablado. Entre bromas y palabras “fuertes”, López Taylor les habló de su vida, de su trayectoria “que no me la creo”, de la inevitable y permanente comparación profesional con su padre el Dr. Juan López y López insigne médico cardio cirujano precursor de la intervención ambulatoria.
Agradeció la deferencia, a familiares de los graduados, “porque ustedes son fundamentales en la formación profesional de sus hijos”. Los exhortó llevar plegada en lo más profundo de su ser y portar con orgullo el nombre de la Universidad de Guadalajara, “hay que ser Leones las 24 horas del día”.
Vino uno de los momentos más emotivos con la recepción de sus diplomas que los acredita como médicos. Se observaron rostros de satisfacción, orgullo y placer. Fueron los momentos más emotivos. Mostrar con orgullo el diploma ante las cámaras de propios y extraños.
Posteriormente se hizo una mención póstuma para el compañero Héctor Alonso Prado Gómez. La entrega de las excelencias académicas y se remató con el mensaje del rector del Centro Universitario de Ciencias de la Salud Jaime Andrade Villanueva.
Texto: Raúl Yáñez de la Cruz